miércoles, 17 de agosto de 2011

MI BUEN AMIGO


Me pregunto como he podido estar tantos años ignorándote. Tu presencia en casa data de muchos años atrás, pero jamás había husmeado en tu mundo. Todo empezó cuando un buen día alguien me preguntó:
-¿Cuál es tu dirección de correos?
¿Dirección de correos? Pensé y entre dientes respondí:

-No tengo.

 Pero no me conformé. Cuando llegué a casa me puse manos a la obra.
Crearme una cuenta de correos fue mi primer contacto contigo. Pedí ayuda para ello, ni siquiera eso sabía hacerlo yo misma.
Empecé a utilizarte tan solo para recibir y mandar archivos por correo, que era lo único que al principio alcanzaba a comprender. Pero poco a poco la curiosidad fue minándome por dentro. Que tú fueses propiedad mía, fue lo que hizo que mi confianza creciera aún más y empezara a utilizarte sin miedos.

Después de que me acompañases como amigo propio, ya no tenía excusas para adentrarme aún más en tu universo. No me conformaba solo con utilizar el correo y navegar por Internet, que fue lo siguiente. Luego sin más pretensiones, vino instalar programas, utilizarlos, crear presentaciones de PowerPoint, rellenar mí propio blog, donde había colocado mis cosas y un sin fin de utilidades, entre otras, desfracmentarte, limpiarte de cookies y archivos temporales sin conexión casi soy capaz de formatearte, pero eso creo que lo intentaré la próxima vez que te haga falta.

Con alguna ayuda que otra, he ido integrándome en tu universo, lleno de mundos mágicos, repleto de curiosidades, que ni mi mente alcanza a  imaginar. Me has permitido formar parte de otras comunidades, virtuales si, pero que llenan como si fuesen reales. Y te puedo asegurar amigo mío, que las personas que pertenecen a esas comunidades virtuales dejan huellas muy profundas.

Me sirves de provecho cada vez que te enciendo. Tu compañía afable ha sido, es y espero que siga siendo, tan mágica como hasta ahora.

Este inexplicable mundo que abres ante mis ojos, un universo, un cosmos, repleto de tantas cosas que aún sabiéndote manejar, me hace sentir inexperta. Este mundo que me ofreces, hoy por hoy lo creo realmente necesario para mi existencia.

No me explico como he podido vivir tanto tiempo sin ti. Espero amigo mío, que esta bonita amistad dure para siempre.
Autora Margary Gamboa. ©todos los derechos reservados.

3 comentarios:

  1. Hola guapa !!
    Una inmensa alegría , saber que estas por esta casa virtual .
    Tienes una página preciosa , elegante , diseñada con muy buen gusto . Donde has depositado tus pensamientos del corazón .
    Gracias por estar .
    Me gusta tu blog y que quedo , si me lo permites .
    Muchos besos amiga

    ResponderEliminar
  2. !Hola Elena! Que alegría verte por aquí, a sido una sorpresa muy agradable. Es difícil encontrarnos, estamos todos tan desperdigados. Gracias por estas bellas palabras y por quedarte a formar parte de mi trocito virtual. Acabo de entrar en el tuyo y también me quedo si me lo permites. Me ha encantado "El farolillo" es muy bueno y divertido. Bueno en general es un magnifico blog, pero no encuentro donde dejarte un comentario, seguiré mirando a ver si doy con el sitio.

    Un abrazo de corazón.

    ResponderEliminar
  3. Cuidado amiga mía con este tipo de amigos, que te dan mucha compañía pero que a su vez entrañan grandes y desconocidos peligros...tu seguidor fiel.

    ResponderEliminar